Esta medida fue aprobada en 2019, tras el Real Decreto Ley 6/2019, de 1 de marzo, de medidas urgentes para la igualdad de trato de oportunidades entre mujeres y hombres. La ampliación del permiso de paternidad ha sido progresiva desde entonces, pasando de 5 a 8 semanas en 2019 y a 12 semanas, durante 2020.
Este nuevo permiso de paternidad a 16 semanas ha entrado en vigor a partir del 1 de enero de 2021.
El objeto de esta ampliación del permiso parental es mejorar la conciliación entre padres y madres y tratar de reducir la discriminación laboral asociada a la maternidad.
Por ello, además del incremento hasta 16 semanas del permiso de paternidad, hay más novedades sobre la distribución del permiso entre los progenitores. Normalmente, aunque el permiso lo pudieran disfrutar uno u otro, lo más habitual es que recayera todo el peso del cuidado del recién nacido sobre la mujer. A partir de ahora, el reparto incluirá una parte obligatoria de baja para que ambos puedan conciliar y atender al bebé.
Con esta ley, las 16 semanas de ambos progenitores se dividen de esta forma:
Hemos comentado en anteriores ocasiones que, si aportas dinero a tu plan de pensiones, consigues una reducción en la base imponible de tu IRPF, de manera que disminuirá tu tributación en el año de la aportación. pero cuando te jubiles y recuperes los derechos consolidados de tu plan, deberás tributar por ello.
Lo normal será que, al jubilarte, tus rentas totales y tu tipo marginal en el IRPF disminuyan, esa tributación será inferior al ahorro obtenido en el año de la aportación (además de que habrás diferido el pago unos cuantos años). Por tanto, obtendrás un ahorro fiscal.
Si tu tipo marginal en el año en que realizas la aportación es del 45%, y al jubilarse baja al 30%, ahorrarás 150 euros por cada 1.000 euros aportados al plan:
1.000 x (45% - 30%) = 150 euros
La cuantía que actualmente es posible aportar cada año al plan de pensiones propio (es decir, uno que hayas constituido tú mismo en tu entidad financiera) está limitada a 8.000 euros, sin que dicha cuantía pueda superar el 30% de la suma de los rendimientos del trabajo y de actividades económicas.
Sin embargo, está previsto que a partir de 2021 dicho límite pase a ser de sólo 2.000 euros anuales, con lo que el ahorro que podrá obtenerse con este producto financiero se verá reducido.